jueves, 21 de junio de 2012

EL CUENTO DEL AGUILA




El águila es una de las aves de mayor longevidad. Llega a vivir setenta años. Pero para llegar a esa edad, en su cuarta década tiene que tomar una seria y difícil decisión.

A los cuarenta años, sus uñas se vuelven tan largas y flexibles que no puede sujetar a las presas de las cuales se alimenta. El pico, alargado y en punta, se curva demasiado y ya no le sirve. Apuntando contra el pecho están las alas, envejecidas y pesadas en función del gran tama­ño de sus plumas, y para entonces, volar se vuelve muy difícil.

En ese momento, sólo tiene dos alternativas: abandonarse y mo­rir, o enfrentarse a un doloroso proceso de renovación que le llevará aproximadamente ciento cincuenta días.

Ese proceso consiste en volar a lo alto de una montaña y recogerse en un nido próximo a un paredón donde no necesita volar y se siente más protegida.

Entonces, una vez encontrado el lugar adecuado, el águila comienza a golpear la roca con el pico hasta arrancarlo. Luego espera que le nazca un nuevo pico con el cual podrá arrancar sus viejas uñas inservibles. Cuando las nuevas uñas comienzan a crecer, ella desprende una a una sus viejas y sobrecrecidas plumas.


Y después de todos esos largos y dolorosos cinco meses de heridas, cicatrizaciones y crecimiento, logra realizar su famoso vuelo de renovación, renacimiento y fes­tejo para vivir otros treinta años más.
MORALEJA:
Deshacernos de los recursos que ya no nos sirven es un proceso díficil, pero es un proceso necesario para dejar espacio a los nuevos recursos que hemos de buscar.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Bien lo dices y te intitulas "...THE BEST..." me encantaría Leer todos y cada uno de los libros que tu ya leíste, Tu Amigo, incondicional, Miguel.
Lo del Águila ya lo sabia pero; Es Maravilloso.